miércoles, 27 de marzo de 2024

MIRAR

 




No te atreves a mirar aquel agujero donde antes gritaba el mundo vivo

y ahora apenas queda un rumor del armisticio

ni recuerdos ya

ni el olor de los fuegos que encendiste

ni el dolor que gustabas cuando ella se iba cada día


solo puedes mirar donde ahora crees que algo todavía late

es un lugar oscuro donde todo es posible

un vacío dadivoso

un vacío materno ensangrentado que volverá a acogerte

donde solo cabe lo posible y siempre nada


allí se escucha un silencio final y trabajado después de tanta espera consumada

un silencio de bien hecho de harapos

donde trenzar sin apenas esfuerzo

la escala que te alce a tu primera casa con jardín


allí las x de tantas ecuaciones no resueltas van a deshacerse

como si fueran pequeños puntos suspensivos que te llevarán al sueño

al amor sin fin y sin objeto

a no obligarte nunca a mirar a ningún sitio prometido.







jueves, 14 de marzo de 2024

ENCUENTRO

 




Un día se encontró con un animal extraño

tenía ojos y boca y tenía labios

el animal lo miraba de frente

pedía algo

era un ser sorprendente

una revelación que la vida le había guardado sólo para él

no le supuso ningún nombre

tenía manos

unas manos blancas que a veces hacían una cueva donde guardada su cara

un día el animal habló

qué extraño dijo

el animal dijo qué extraño sin apenas mirarlo a los ojos

le contestó moviendo los labios

porque no encontró palabras

si hubiera encontrado las palabras hubiera escrito un poema de amor

y se lo habría dado





lunes, 11 de marzo de 2024

LA REALIDAD: BUSCA Y CAPTURA

 

   


                                          

                                                                       Mildred Burton





La realidad habla pero no se le entiende.

Revela por el mero hecho de ser. La realidad implica revelación.

Ese decir, esa revelación no supone que exista un receptor que la comprenda, que la interprete al pie de la letra.

No existe tal letra en ese hablar de la realidad. Nadie que la escuche a través de la letra, podrá entenderla.

La realidad es compleja en el sentido de que no existe una coagulación de ella que pueda ser diseccionada, estudiada. Cualquier “muestra” de la misma es una manipulación, una falsedad.

La realidad es indivisible. No existen fragmentos reales de la realidad.

Por eso la realidad es irrepresentable. El realismo es una falsificación de lo más auténtico de la realidad, que es la realidad misma.

Sólo puede representarse lo que de ella podemos absorber exclusivamente a través del inconsciente.

La parte del sujeto tomada, poseída por el logos, que es inoperante para saber de la realidad y que, en consecuencia, tiene como misión reducirla a una letra, a un discurso lógico (sometido a lo que ese logos pueda dar de sí) queda (des)compensada en el otro extremo por el inconsciente.

El inconsciente absorbe, se empapa de la realidad, más allá del principio de interpretación, y ésta sigue viva, latiendo en el sujeto letrado e ignorante.

El inconsciente hace saber.

El sujeto es poseído por la realidad a través del inconsciente. Por el inconsciente.

Lo más importante del inconsciente es su operatividad. El inconsciente no deja nunca de funcionar: trabaja, constituye, crea, tiende a, hace vivir al humano un plus puramente humano, más allá de lo estrictamente animal (la programación para la persistencia biológica) y de lo pertinente al logos (la pretensión de transformar la realidad en un discurso homologable por ese mismo logos, en un texto que él pueda leer).

Una vez dije que lo que se reprime (en el sentido psicoanalítico) es el amor. El amor es una expresión de la realidad. Indómita. Inenarrable..

A lo que cabe añadir: lo que se reprime (en el sentido censor) es el inconsciente.

Así, por ejemplo, los represores pretender establecer listas de legitimidad de lo que, sin tener ni idea, extraen de lo inconsciente: así predican sobre placeres legítimos, sexualidad legítima, agresividad legítima etc. Legítimo es, para la represión, aquello que es válido para la eficacia, para que lo humano sea, por fin, una máquina eficiente. Más "salud", más “seguridad”, más “claridad”, menos caridad.

La eficacia pretende transformar la realidad en algo reproducible a través de cualquier máquina.

Reproducir es poder.

Sin inconsciente sólo habría reduplicación, copia. La realidad sería una copia de la falsificación de la realidad que hace el logos, siempre al servicio de lo asimilable, de lo permisible.

El inconsciente no copia la realidad.

El inconsciente repite: no cesa de revelar la existencia del intervalo que hay entre las cosas de la realidad, lo que hace que ésta pueda ser soñada, narrada, recordada y olvidada.

Ese hueco, el intervalo, es el eros, el silencio que inventa la música. El tic-tac tartaja de la repetición, el intento de pillarle los pies al intervalo para hacerlo desaparecer es la muerte, con su silencio solidificado que no termina.

Frente a la disolución que la realidad lleva implícita, frente al ex-tasis, a la fuga, a la deserción de los márgenes impuestos por el intento de convertir la realidad en un texto inteligible, la represión actúa. Con la fuerza de un gulag blanco, de un auschwitz que por fin no teme decir que ha triunfado desde el principio mismo de su levantamiento.

¿Cabe vivir en una coexistencia dialéctica entre el logos no sometido a lo aceptable y el inconsciente atendido, no reprimido, no aniquilado?.

Tal vez un día podamos soñar dormidos y crear despiertos. Tocar el color que todavía no hemos barruntado con las manos y quemarnos en una fulguración amorosa que no exija retorno.

Porque, es cierto, la realidad en su escabullimiento ha dejado sus restos en los rincones, en los agujeros del suelo, en las fosas sépticas, en los charcos donde beben y se miran los perros, en los depósitos donde duermen los marginados, los santos.

Sólo los santos atienden el inconsciente sin espantarse. Los santos no padecen vértigo ni fobia a esa oscuridad que les llama para invocarles y abocarles hacia la luz. La misma que invoca y aboca a todos los humanos que no decidan vivir muertos.

Los santos no se escandalizan. Abrazan el bien y abrazan el mal. Se saben humanos y caminan pegados al suelo como si nunca hubieran sabido leer.

El arte es ágrafo y vive de los sueños.

El arte solo vive de la realidad. Y la salva y nos salva.



                                                                              Manuel Agujetas












miércoles, 28 de febrero de 2024

TRATADO BREVE DE POÉTICA

 




¿Cómo saber de aquello: la fiesta concreta del amor

Exacerbada su pasión porque detrás y muy cerca estaba el adiós

El final

El primer signo

Cuando los líquidos que el verano absorbía llegaban a lo más alto de un cerebro universal

Fuera de sí

Fuera de todo?



¿Cómo explicar aquello que no tiene palabras?

Aquello que si existe es precisamente porque no tiene palabras

Y está a la espalda de la historia

A la espalda de todo

Del mundo

Del sentido de la vida y de la muerte.



Escribirán los que saben hacerlo para rodear un vacío de su conocimiento

Para inventar el espacio cálido

Donde se supone que tuvo lugar el gozo

Y el adiós



28/2/24










viernes, 23 de febrero de 2024

S/algo

 



S/algo




Ese algo fue lo que trajo al nido donde crecerían los pájaros que iban a poblar el aire

el veneno que hacía que toda memoria se fundiera en ello

como pegada a ello y convirtiendo lo que pudo ser pensar /volar en un eslogan muerto/la muerte/

la sumisión.

Si los pájaros en su vuelo ver pudieran las cosas que ocurren en esos valles potencialmente bellos

embarrados por los tóxicos

aún así valles/

nuestros valles

los valles que los pájaros han dado a sus hijos que ahora se adormecen

pegados al abismo hipnótico de la depravación que los convierte en plásticos

o en drones que ven lo que han robado a sus ojos

serían libres o simplemente libres transformadores de la miseria.



23/2/23




jueves, 22 de febrero de 2024

REPETICIÓN E INTERVALO

 


                                                



Todo el esfuerzo se invertía en disimular, camuflar, borrar la Repetición: el ruido infinito, casi monocorde, de lo Uno yéndose y viniéndose sobre el desecho de la cosa muerta.

A la repetición querían confundirla para fingir que no existía, llamándola orden, armonía, rutina, calendario, historia, geometría, arte, sincronía, música. Pero es imposible que la Repetición no se revelara, aunque quisieran cambiarle su nombre, porque, por encima de rodo, la repetición es la materia de la muerte que se infiltró y llegó a la vida a través de un Accidente inexplicado.

La Repetición corre pisándole los talones al Intervalo que vive entre el Uno y el Uno, va tras su aniquilación. Suprimir el intervalo supondría el triunfo absoluto de lo Uno en su quietud. Sería el triunfo de lo Absoluto. El absoluto Mal. Una muerte elevada a la potencia infinita. Pero no: es imposible que el intervalo no sea, no esté, no separe, no mantenga lo vivo entre lo muerto, porque está hecho de silencio puro y es lo inmortal.





martes, 20 de febrero de 2024

TRES FRAGMENTOS SOBRE EL MISMO TEMA

 




                                 TRES FRAGMENTOS SOBRE EL MISMO TEMA




                                                                        UNO


Poema encontrado en la última página de Guía espiritual de Miguel de Molinos, edición de Alianza Editorial, prologada por José Ángel Valente.

El libro lo compré en junio de 2004. El poema es, con toda seguridad, de ese mismo año.



Háblame. Yacido

aniquilado como el óxido que han creado las lluvias

recojo las palabras

así también los fríos de todos los inviernos


Hago con ellas cuentas de luz

en esta noche donde nada queda sino esperar el alba


Despertaré cuando aquéllas ya sean sólo ruido

cantos de pájaros sencillos

o el chocar de las gotas remorosas en los cristales de fuego


Ruidos que acompañan ignorantes

los oídos apagados de los muertos




                                                                DOS


                                                               Sueño



Estoy con Joan Manuel Serrat, tal como lo recuerdo en los años sesenta o setenta.

Le digo que si en Cataluña quieren hacer una revolución, una revolución buena (que no sea una mera venganza, sino algo nuevo, algo que no puede saberse lo que es o será) deben dormir la siesta.

Le digo que aunque lo que se haga en ella sea sólo dormir, tiene algo voluptuoso: el deseo animal de dormir, el azul del cielo del verano, algún olor determinado.

Joan Manuel me mira con atención. Me escucha. Parece entender algo.


18/2/23




                                                                           TRES



A cuyo salto volvió de pronto

y en aquel cuerpo encontró lo nuevo

y supo que la verdad es No

es saber llegarse al punto cero

el centro de lo más invisible.


20/2/23