miércoles, 30 de septiembre de 2020

¿QUÉ SERÁ DEL OTOÑO? CAPÍTULO 3



 

Con aquella música (esos susurros de metal

esos hierros repetidos en el ala del aire) entrando por los oídos en la tarde

ya oscura del otoño

¿qué será de él qué será del otoño?


¿dónde los truenos y los relámpagos tragados ya por los pájaros

camino del sur donde se borra la memoria?


ya no guiñarán los ojos sus párpados como gusanos de luz

esas noches de conversaciones silenciosas cuando se veía por un segundo

el mundo acurrucado en las montañas frente a mi ventana

¿qué será del otoño?


sin ojos que miren el resplandor de las luces sagradas que preceden la voz

si no hay palabras ya

¿qué será del otoño?


y aunque los pájaros propaguen el fuego

será el hielo quien rodee los brazos y los talles y las hojas y sólo quedará

una ceniza que el blanco de la niebla reducirá a un cero absoluto

y en medio de todo ya nadie

sólo esas partículas elementales que bordan el recuerdo

que no se puede borrar.

domingo, 20 de septiembre de 2020

FÍJATE FÍJATE

 









                                                                                               Danzad, danzad, malditos


                                                FÍJATE FÍJATE


 Fíjate

las calles están anudadas de cuerpos que piden

un bollicao de opium antes de llegar

a la cámara del hambre

de la pena de morirse

fíjate como las mangas blancas sutiles de la beneficencia

sutilmente les cogen de la mano

les bendicen, les hacen llevar su mano a sus bocas

benevolentes y les besan adiós adiós

les dicen adiós vais a morir

sois tan pobres que solo tenéis derecho a un aliento amoroso

y aun marchamo oficial que diga pobre pobre visto bueno

los cuerpos se anudan en ochos retorcidos que recorren las calles

los tecnonacis que ganaron la última guerra mundial travestidos de hombres y mujeres de bien

enseñan sus comisuras mudas y descargan salivas como balas

en el estrecho pecho de los que levantan la mano pidiendo un donut por caridad

por caridad

mientras les enseñan el redil

es lo correcto es lo correcto

aunque fíjate como se levantan oleadas de santos que han arrancado algunas cabezas

de parlamentarios y hacen ademán de hincarles el diente benedictus benedictus

cantan pero unos a otros se las quitan de la manos y entre todos

democráticamente deciden tirarlas a la basura

y los travestidos en mujeres y hombres de bien

es lo correcto es lo correcto

incómodos por las hordas buscando la página que les guíe de nuevo a las sonrisas

enseñan sus tatuajes, lanzan twiters a diestra y siniestra y no dan crédito al ver de una vez

que sus cuerpos descabezados no hacen sino temblar

en los antecedentes de la muerte.

Las calles están despavoridas

se sienten los pasos de los pobres que están ahítos de mermelada y cae de sus bocas

una pasta coagulada de palabras que quieren pronunciar,

de su boca ¿qué podrá salir mas que la espesura de un silencio?

fíjate que del silencio la fuente si manara qué diría,

igual decía un impedimento, un rezo, una imprecación, un chiste,

un dónde vamos esta noche, un apártate de mi satanás, tontolaba, vete, no quier saber más de tus alharacas déjame partir

qué dirían los pobres si de su boca escapara

aquello que tapa tanta oscuridad tanta luz

qué vas tú a entender si no has sacado tus manos de donde comen la papilla

los que quisieron borrar los templos extraños los templos extraviados

esos lugares sagrados hipnóticos donde los hambrientos buscaban una revuelta definitiva



Fijate cómo cabalgan las cebras por las calles medio locas

cómo las acordeones de los búlgaros tocan acompasadamente las viejas canciones prohibidas

a un rumano se le empalma la trompeta sopla sopla

los gitanos devoran la última cabra se retuercen los ochos

del hambre y acéfalos los que van subidos en los jeeps con la mano en el corazón

saludan a las cámaras.

No hay ojos para tanto pero fíjate fíjate

las calles parece que están preñadas de un solo trueno de una sola luz.


lunes, 14 de septiembre de 2020

NOVEDADES MUSICALES

 


Ya podemos escuchar la versión de Lang Lang de las Variaciones Goldberg.

Me he permitidos divagar, con los ojos entornados, mientras iban llegando cosas por las vías nerviosas, arrastradas por las notas.

Pónganse la música. Si no, no hay manera.




ESCUCHO A LANG LANG


Escucho a lang lang

tocar en su piano de juguete

que le compraron en la tienda de los chinos

las variaciones goldberg

escucho la inocencia del agua

el roce del babero de un niño inocente

encerrado solo en la agonía de la tarde de un domingo

mirándose en el brillo de las teclas de plástico

entre regaliz y regaliz

llevándose a la boca el dolor con los labios abiertos


escucho como llegan los pasos de su madre

que se fue llorando una tarde

y volvió con el rimel corrido y una risa nueva

que se paró llevándose la mano a la boca

mirando al cielo y cogiendo con los dedos

el susurro cada vez más cerca del incendio final

que el corazón del niño hacía subir al aire


escucho el silencioso oído

de glenn subido desde siempre

a la silla del padre

llorando ahora que está ya muerto por la música que sigue bailando entre los santos y los pobres


escucho que me dice

qué ojo hay que abrir

qué ojos hay que cerrar

para sin ser abrirse

como una matriz enamorada a la tormenta que una noche

despertó a bach cuando

preso de un trance pensó que había olvidado

el nombre de sus hijos


escucho las variaciones

ahora lang lang está subido en lo más alto de la escalera

y yo levanto las manos atontado

creyendo que así podré evitar la caída.




jueves, 10 de septiembre de 2020

¿QUÉ SERÁ DEL OTOÑO? Capítulo 2














 




Miraba a un pozo donde el negro brillaba

pues ayer hubo sol y el agua fue capaz de guardar entre sus moléculas de vida

algo de la luz, ahora yéndose despacio hacia las grietas,

y sus ojos anegados de lágrimas de barro

batían la charca y unas mariposas también ajenas

brotaban sin más entre tanta desolación


¿qué será del otoño?

pudiera haber pensado el hombre, mirándose en el espejo

más claro de todos, al fondo miraba,

donde los vértigos se ríen de si mismos,

donde cae la mirada y se adivina el arcos iris infinito de la vida

nunca procesada en la memoria, nunca plasmada en la ecuación,

nunca atrapada en la red, siempre múltiple

en los panes,

en los peces,

en el hambre y el amor.


martes, 8 de septiembre de 2020








 



             CÁPSULAS PARA UNA TERAPIA MEDICAMENTOSA DE LAS VÍAS NERVIOSAS


                                                                          1


El hipo del hipar diafragmático del hombre alambrado que ronroneaba despacio en un idioma sánscrito y aletreado las cifras de la peste, que se llama Simón/Pedro, se oía allende los cristales y quienes escuchaban ese hipar se tragaban su propio hipo y se hacía así un silencio sepulcral que daba paso a la noche y a la paz perpetua.


P.D. (Nota poiética)

Esta cápsula de letras que acabo de cocinar admite en su composición, si así se desea, comino. Si se toma por los ojos, y no por la boca, no sabe a nada, pero revela su propia esencia: la interrupción tartamuda de las metáforas, siempre inconclusas, la marcha atrás como método de construir un final sin final.


viernes, 4 de septiembre de 2020

¿QUÉ SERÁ DEL OTOÑO? Primera parte




 Como sea que no hay nada serio fuera de la serie, inicio hoy la primera entrega de la que llamo "¿Qué será del otoño?"

Que les coja desprevenidos, deseo, que entre las sombras y turbiedades de la ropa de estar en casa se les cuelen las goteras vespertinas de la felicidad y de la confabulación de los poiéticos.




                                                       ¿QUÉ SERÁ DEL OTOÑO? 

                                                                         Primera parte


¿qué será del otoño?

¿qué será de las tardes cuando vayan en fila de a uno

al frío,

a los  cuchillos?

y de la oscuridad,

¿qué será

cuando la luz completamente se haya ido

y nos deje una ausencia cada vez más oscura?


¿qué será de la noche

cuando vaya durmiéndose en sí misma

y tarde cada vez más en despertar?


¿qué será del amarillo

que dejan en la piel de las casas

los últimos lamentos del sol

para que sigan viviendo

los viejos y los presos

que miran detrás de los cristales eternamente duros

y ciegos?


¿qué será del otoño

cuando el fuego de su roja cabeza

se apague del todo,

cuando advierta la nieve

de la traición

y lleguen sin avisar los recuerdos?