Ahora el libro te lleva de la mano a donde nunca te atreviste a llegar.
Te muestra el fracaso, el fiasco de las vidas,
pero guarda mejor que tu memoria el nombre de la calle
donde un día aún soñabas con la zarza ardiente del amor.
Musita a tu silencio lo que al calor de aquel verano decían tus versos,
cuando corrías a casa para guardarlos,
no fuera a ser que el amarillo del fuego
o el tedio de las calles medio muertas te borraran con ellos para siempre.
Porque en alguna página perdida encontrarás de nuevo
la ternura que sudaba a mares aquel cuaderno
donde escribías el canto de los cantos.
El libro te lleva de la mano.
Aunque seas aún más ciego,
leerás en su blancura las letras misteriosas que crean el mundo,
aunque el idioma ya sólo sea un hierro suelto en el cementerio de las máquinas.
El libro te lleva de la mano a la mañana
cuando viste por primera vez el horizonte.
Es verdad. El libro es ese compañero fiel que te envía, una y otra vez, al olvido de ti mismo, para recordarte que todavía deseas, como la primera vez. Compartiré tu bella reflexión. Gracias.
ResponderEliminarCon un abrazo. https://soplodeconocimiento.blogspot.com/2025/08/el-libro-te-lleva-de-la-mano.html
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